Originales maceteros y plantas fueron colocados en las materas y «Punto de artesanos» ubicados en el ingreso a Tupungato, gracias a un trabajo de los estudiantes y docentes de una Escuela de nivel secundario de La Carrera.
Ayer martes, en la mañana, personal municipal, directivos y docentes de la Escuela N° 4-260 «Alma de Montaña» y de la Escuela Artística Vocacional N° 5-018 “Chalo Tulián”, se reunieron en uno de los ingresos a Tupungato (donde inicia la Ruta Provincial N° 86 destino a Los Cerrillos). Allí se realizó la colocación de 6 maceteros metálicos que ahora son parte del paisaje y dan la bienvenida al departamento.
Esta acción fue posible gracias a un proyecto impulsado por la Escuela Alma de Montaña -donde asisten amplio porcentaje de jóvenes del distrito San José- desde la cual fomentan el cuestionamiento sostenido en los estudiantes e incentivan a ser observadores críticos del lugar donde viven e identificar necesidades o problemáticas para, entre ellas, seleccionar una sobre la cual luego trabajar institucionalmente y buscar posibles respuestas o acciones.
Con ese espíritu nace el proyecto bautizado «Embelleciendo mi lugar» del cual son producto estos objetos que fueron realizados de manera interdisciplinaria y abordado desde las materias curriculares Ciencias Naturales, Lengua, Música, Historia y Formación Ética y Ciudadana.
En tanto a la intención de la iniciativa, la Docente Mariela Bejarano expuso: «El objetivo que nos inspiró desde los distintos espacios fue concientizar a cada uno de nuestros alumnos y a la comunidad sobre el cuidado del espacio público, el embellecimiento del lugar y lograr ese sentido de pertenencia que trabajamos desde la escuela».
Para el desarrollo de esta propuesta -iniciada en el año 2021 por estudiantes del 1° año- los ideadores resolvieron articular con otras instituciones para trabajar colectivamente, y allí es cuando entra en acción la Escuela Artística «Chalo Tulián» quienes no sólo se comprometieron con la causa sino que celebraron ser parte de este noble trabajo.
Por otra parte, solicitaron a la Municipalidad colaboración con materiales, instalación de los porta-macetas y el riego de las especies.
«Presentaron un proyecto ante el municipio para embellecer espacios públicos del departamento, empezando por el distrito de San José y nos encontramos hoy con esta acción específica de la colocación de unos maceteros con macetas que tienen plantas ornamentales y autóctonas de la zona que son originadas desde proyectos llevados a cabo», refirió la Ingeniería perteneciente a la Dirección General de Obras, y parte del equipo de Espacios Verdes, María Emilia Di Marco.
Para la selección de la ubicación donde hoy se lucen los maceteros metálicos colgantes, los y las estudiantes consideraron una zona del distrito donde viven, por lo que seleccionaron el espacio de las “Materas” y «Punto de artesanos» ya que quisieron poner en valor la instalación y disposición de mesas y sillas del lugar y consideraron oportuno adornar mencionado sector sumando color, y visibilizando la cultura e historia de su pueblo.
El diseño y su motivo
La construcción de los porta-macetas estuvo encomendada a los integrante del Taller de Esculturas de la «Chalo Tulián» que fueron por la línea del arte rupestre: «Lo interesante de la artística es que no solamente son estudiantes en edad adolescente sino también hay estudiantes adultos» ponderó el Director Federico Gil y aseveró: «La idea principalmente es que desde la educación, desde las escuelas los chicos, las chicas sepan que pueden ser protagonistas de un cambio, aunque sea pequeño, como este embelleciendo el lugar donde uno vive».
En cuanto al diseño de las macetas estuvo a cargo de los estudiantes de Alma de Montaña y en su proyecto refieren que fue seleccionado teniendo en cuenta los contenidos contemplados en las clases de Historia y Formación Ética y Ciudadana donde analizaron los motivos decorativos de la cerámica indígena local conocida con el nombre de “Viluco”, correspondiente al periodo Agroalfarero Tardio y Colonial Temprano (siglos XV-XVII) donde se atribuyó la producción de dicha cerámica a los pobladores locales: Los Huarpes, quienes habitaban el norte y centro de la provincia de Mendoza. Y tomaron a consideración el diseño de distintas vasijas encontradas en el Departamento, en los sitios de La Arboleda y Agua Amarga, observando los distintos aspectos decorativos: patrones escalonados, líneas rectas paralelas en posición vertical, alternando el color rojo/negro en zigzag, doble zigzag, cuadrados, rombos, etc; que luego los educando -que están proximos a finalizar 2° año del nivel secundario-, son los que replicaron en las macetas instaladas.
Para la selección de las especies a plantar eligieron, conceptualmente desde el espacio de Ciencias Naturales, aquellas que mejor se adaptan al proyecto teniendo en cuenta su utilidad ornamental, pertenencia al lugar y resistencia al frío y sequía característico de la zona donde se colocaron. «El eje fundamental de este proyecto es darle sentido de pertenencia a la comunidad y poner en valor espacios públicos de nuestro departamento» sumó Di Marco y finalizó: «El municipio ha acompañado esta iniciativa en sus distintas etapas y hoy nos sentimos felices de ver la concreción de este proyecto».