La «Capital de la Nuez y los Vinos de Altura» fue la anfitriona de uno de los eventos más exponentes en materia vitivinícola a nivel provincial y contó con la presentación de vinos que llegaron de 31 bodegas del Valle de Uco. La novedad de este año, es que no fue una cata a ciegas.
Los 28 años de UCOVIN tuvieron un tinte especial, una vueltita de rosca que tuvo como intención celebrar y ponderar a los productores y todas las aristas que hacen posible la elaboración del vino. Y es que en esta edición -bautizada como la «Gala de las bodegas»- las protagonistas fueron ellas, y no se trató de la tradicional evaluación que se hace en Valle de Uco, sino más bien de un encuentro para festejar todo lo que converge alrededor de esta milenaria bebida.
El pasado viernes, el Hotel de Turismo de Tupungato -departamento elegido ya por excelencia- reunió a amantes y conocedores, pequeños y medianos productores, familias y trabajadores que hacen posible el producto final.
Fue un evento místico desde el inicio, al ingreso del lugar daban la bienvenida misteriosos personajes -precisamente las estatuas vivientes del agua y de la tierra- que con susurros cautivadores anunciaban que sería una noche mágica.
Hacia el interior del lugar, «duendecillos del vino» le daban el toque enérgico y chispeante al encuentro e invitaban a disfrutar el gran abanico de varietales que se lucían en la barra, con sus originales etiquetas y especificaciones. Otros fantásticos personajes que se lucieron fueron: Dionisio, el dios del vino, la fiesta y la fertilidad; Baco, el dios griego del vino; y Hathor, la diosa egipcia del vino y el fuego.
Por supuesto estuvo presente el Intendente local, Gustavo Soto quien saludó a los presentes y celebró ser el anfitrión de esta gala: «La verdad que yo quiero felicitar una vez más a la asociación de UCOVIN, a quienes la componen y a un sinnúmero de pymes que son bodegas, productores, que hacen de sus pequeños viñedos y de sus pequeñas bodegas algo muy importante» además alentó a seguir trabajando y fomentando el enoturismo, que fundamentalmente para el departamento que él conduce, es una nutrida actividad que trae grandes beneficios a diferentes sectores.
En cuanto a la noche, el clima acompañó y el espacio elegido para transcurrir y disfrutar fue el parque del Hotel, con su verde cautivante e incluso una barra al aire libre para deleitarse.
Además hubo un exquisito lunch que fue combinado con un condimento especial, los espectáculos artísticos:
La magia estuvo en cada rincón, y no sólo con los «duendecillos del vino» sino que también asombró un fantástico mago con sus trucos más impactantes.
Música en vivo, que en esta ocasión tuvo como primera presentación el show de Carina Moreira con un repertorio de clásicos en español, inglés y hasta portugués acompañada de su percusionista. Luego fue el turno del conjunto musical tupungatino «Las voces del alma» que cautivaron con su estilo melódico-lírico.
Y como cierre estelar encendieron la Gala un despliegue de malabaristas de fuego que se llevaron el aplauso de todas las personas presentes.
«UCOVIN nació en 1995 con muy poquitas personas en el INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) y el espíritu de UCOVIN era hacer conocer los vinos del Valle de Uco en el mundo entero y después año a año se fue aumentando la cantidad de participantes y hemos llegado a la UCOVIN número 28» recordó la Presidenta de la Asociación, Mirtha Cataldo y deseó: «El anhelo nuestro es poder seguir haciendo la degustación, poder seguir degustando los vinos del Valle de Uco».
Así pasó una nueva ceremonia del vino y por supuesto no faltaron las copas en alto, los catadores más minuciosos y una que otra manchita de vino tinto para el recuerdo.